Levitación en fotografía: Los secretos del montaje

La primera vez que vi una instantánea con un personaje en plena levitación, me vi absorto, mirando fijamente la imagen durante 15 minutos en total asombro. No podía concebir cómo se había podido capturar la imagen. Me cautivó la historia que me contó durante aquel lapso de tiempo. Algo surrealista, mágico e imponente. Con el paso del tiempo mi interés en el mundo de la imagen fue aumentando y fui descubriendo alguno de los secretos que ocultaban los grandes profesionales de la fotografía. Descubrí que aunque ciertamente no se trataba de magia, la conceptualización de la imagen y la ejecución podía llegar a ser bastante difícil y meticulosa, casi obra de un mago de la imagen. Gracias a los fotógrafos que han dominado las técnicas empleadas en levitación podemos hoy comprender los secretos de estas composiciones y es que no tienen ningún desperdicio.

Todos solemos pensar que las imágenes de levitación parecen mágicas, pero no parecen mágicas, realmente son mágicas. Porque la magia es todo aquello que desafía lo imposible y esto justamente es lo que las instantáneas de levitación hacen, desafían lo que es natural. Este tipo de composiciones ha existido desde hace bastante tiempo, y han sido ejecutadas en todo el mundo y sin embargo cada vez que tú o yo echamos un vistazo a una, nuestros ojos no pueden evitar sentirse atraídos por ellas. Pero no es para menos, algunas de las imágenes están tan bien construidas que es difícil de entender el «secreto» que hay detrás de ellas y es por esto por lo que, probablemente, son tan fascinantes; crean curiosidad, casi como un acertijo, casi como un reto que nos sirven en bandeja envuelto en un bello papel de regalo.

Una de las características que más suele destacar de este tipo de composiciones, es su simplicidad. El concepto de objeto flotante es tan potente, que se sostiene por sí solo y requiere de pocos elementos compositivos. Con un objeto flotante, nos podemos permitir el lujo de trabajar en una composición minimalista con total tranquilidad. Rey Vo Lution, un fotógrafo experimentado en levitación, afirma que la composición no sólo puede ser simplista, sino que también debe serlo. Él le da gran importancia a este punto.

Es importante señalar que el post-procesamiento juega un papel importante en imágenes de levitación y es imposible obtener resultados finales sin Adobe Photoshop o un software similar. Además, la imagen final será muy probablemente una composición formada por dos o más fotos. Nos va a ser muy importante contar con un buen programa de edición para poder realizar buenas integraciones en nuestras composiciones.

Las dos formas para llevar estas composiciones a cabo son o a través de la fusión de dos imágenes de diferente origen (lo cual puede resultar bastante complicado sobre todo para que ángulo, texturas e iluminación se integren a la perfección) o bien a través de la fusión de dos imágenes tomadas en una posición y escenario idénticos, situando la cámara fotográfica sobre un trípode. Generalmente en la imagen inferior (la que situamos en la capa inferior) suele ser del escenario o la habitación en cuestión vacíos y la superior con el personaje en cuestión situado en la posición idónea con todos aquellos elementos de sujeción que sean necesarios. A continuación se creará una máscara de capa sobre la imagen superior  y se comenzará a extraer todos aquellos elementos de sujeción que necesitamos extraer para crear el efecto de levitación.

Veremos, que la fase de conceptualización aquí es muy importante. Para ello, es muy recomendable que nos hagamos con un bloc y un lápiz y hagamos los bocetos posibles. Esto nos ayudará a desarrollar la idea con mayor profundidad y detenimiento. Brooke Shaden nos aconseja que hagamos esto, es la forma más precisa y técnica de concretar nuestra composición antes de pasar a la acción propiamente dicha.

Marina Gondra nos dice que las dificultades de levitación dependen de la posición del personaje. A veces, sólo tiene que dar un salto simple y otras veces su cuerpo necesita parecer que levita en posiciones extrañas. En consecuencia, la ropa y el cabello tienen un papel importante dentro de la fotografía. Si se supone que el personaje debe estar flotando, también lo estarán la ropa y el pelo.

Hay siempre dos elementos esenciales en cada composición de levitación: El fondo y el personaje. Se debe prestar atención siempre a la profundidad de campo. El método Brenizer puede ayudarnos a crear una profundidad de campo muy superficial, lo cual nos va a dar un mayor realismo y una mayor calidad final.

Por otra parte, el ángulo de tiro en es extremadamente crucial, aunque esto es una cuestión más bien individual. El ángulo contrapicado puede resultar muy expresivo y eficaz. Este nos dará la sensación de que el sujeto se está mucho más alto y más lejos de la tierra.

Una vez que el fondo es capturado, se debe tomar la imagen del sujeto. Se recomienda tratar de tomar las fotografías del personaje y el escenario en el mismo lugar y a la misma hora. Cuando se trata de composiciones independientes suelen aparecer inconcordancias. La iluminación y las sombras son unas de las primeras cosas que debemos abordar, por lo que es muy recomendable que el tiro de fotografías se de en un mismo espacio y lugar. Si esto no es posible, la iluminación tendrá que ser procesada en la postproducción, y esto puede llegar a ser bastante difícil.

Otra parte muy importante de nuestra imagen es capturar el cuerpo del sujeto en una posición natural. Si el sujeto está saltando o acostado, el lenguaje del cuerpo tiene que coincidir con la levitación. La fotógrafa Marina Gondra practica a veces delante de un espejo antes de autorretratarse.

Es recomendable que tratemos de disparar con una velocidad de obturación de al menos 1/200 o superior. Si no hay mucha luz, se deberá aumentar el ISO. Recuerda que con una velocidad de obturación lenta, la imagen saldrá borrosa.

Una de las cosas más interesantes de este tipo de composiciones, es que se trata de trabajar con nuestra creatividad y nuestra técnica a otro nivel. Técnica, imaginación, y sobre todo libertad, están unidas en la levitación y la magia gravitatoria en las composiciones fotográficas.