De cinco fotos manipuladas de una forma asombrosa, vamos a pasar a una entrada un poco curiosa y divertida. Divertida por el hecho de que alguna de las cinco fotografías que encontraréis, seguramente que serán capaces de que se dibuje una sonrisa en vuestro rostro.
Por otra parte, son fotografías que están muy bien ejecutadas y que serían difíciles de explicar si todo el mundo en el planeta perdiera la memoria sobre qué es Photoshop y la fotomanipulación fuera algo casi mágico. Imaginad que tenéis que explicar qué hace un burro con un perro, un gato y un gallo subidos a su lomo con una postura tan acrobática sin moverse.
La fotomanipulación sirve para crear escenas y rostros bien curiosos y divertidos. Esta vez son cinco animales transformados con un poco de sorna y malicia como pasa con la orca y los pingüinos, siendo estos últimos los que suelen ser uno de los platos favoritos de los primeros.
El más terrorífico es el rinoceronte con esa cabeza de tiburón blanco en el que casi se ha transformado para idear otro animal. Tenemos al pato transformado en un caballo blanco o al revés, tal como queráis para interpretar una escena un poco extraña e igual de divertida.
Nos quedamos al final con el unicornio cabalgado por un gato con sus anteojos, sombrero de copa y puro para ir lanzando fuego por los hocicos e ir desintegrando a lo que parece un humano. Champiñones por todas partes para completar una escena totalmente surrealista en el que nos gustaría saber la razón para crear un ejército de unicornios que echan fuego.
Cinco fotografías manipuladas que nos lo pondrían muy difícil si apareciéramos en un planeta como el nuestro en el que no existe el fotomontaje ni Photoshop. Las caras de aquellos que vieran las fotos serían memorables.
obviamente me encanta!!!!
Pues que es un Patallo, obviamente…