Ayer mismo estuvimos ante la gran propuesta artística de Munro con 50.000 luces que visten los páramos desérticos de Australia para transformarlos en alucinaciones surrealistas como si fueran sacadas de un cuento de hadas.
Es en esa gran cantidad de luces en las que encontramos similitudes con el trabajo de Louse Law con sus 30.000 flores suspendidas en el aire para dibujar un paisaje floral que llena esa sala para darle toda su fragancia y belleza. Una propuesta artística donde la suma de tantas flores nos llevan a respirar otros sentidos.
La artista Rebecca Louse Law es conocida por sus instalaciones de flores que han aparecido en todas partes, desde Times Square en Nueva York al Centro Cultural de Onassis en Atenas. En 2014, exhibió en el Garden Museum de Londres, donde preparó 4.600 flores que colocó en el techo en una forma de exploración entre la relación entre la flora y la moda. La última creación sigue ese mismo camino en un centro comercial llamado Bikini Berlin.
Ahí ha creado una instalación de más de 30.000 flores suspendidas del techo. La pieza se titula Garten y está compuesta por una variedad de rosas a orquídeas y otras clases de flores. Cada una de ellas está cortada a mano y colocada desde un cable de cobre para posicionarles desde distintas alturas para crear un efecto de ondulación.
La instalación es una colaboración con una iniciativa llamada Toll was blumen machen y que tiene como intención cubrir el esplendor y la diversidad de la estación de la primavera. Garten también invita a los espectadores a considerar la sinergia entre lo orgánico y la belleza realizada por la mano del hombre, lo que sugiere que complementarse es donde hay que dirigirse.
Si queréis seguir el resto de sus trabajos tenéis su Facebook. Una artista de lo floral con inmensas instalaciones creativas.