La locura ha estado muy asociada con el arte y la manifestación de la emoción desbordada y desmedida. Muchos de los grandes artistas del mundo de la imagen han sufrido problemas de diversa índole y esto se ha reflejado muy bien en sus trabajos.
A continuación recordaremos cinco artistas del mundo de la pintura genuinos y que en algún punto de su vida fueron diagnosticados de problemas mentales. Algunos poseían formación académica y otros tanto pertenecían al art brut o marginal, comenzando a desarrollar su labor como pintores desde centros clínicos.
Vincent Van Gogh
A pesar de que hoy es uno de los artistas más cotizados mundialmente, en vida no ganó ni un céntimo con sus obras y además estaba estigmatizado de algún modo por la sociedad de su época. Nuestro autor estaba afectado por una de las enfermedades más complejas a nivel psiquiátrico, la esquizofrenia. Esta dolencia le hacía experimentar alucinaciones de todo tipo y le llevaba a estados agudos de confusión e incluso amnesia. Sin embargo, fue esta circunstancia la que lo llevó a desarrollar a un nivel exponencial sus cualidades artísticas. Muchas de sus obras más aceptadas y alabadas las desarrolló en los períodos más agudos de la psicosis incluso cuando estaba recluso en el manicomio de Saint-Rémy.
Séraphine Louis
A pesar de que su obra es comparada con la de Van Gogh, sigue siendo una desconocida para muchos. Huérfana desde los 7 años, se mostró siempre tímida, retraída. No hablaba con nadie y se introdujo en el mundo de la pintura a la edad de 42 años. Los investigadores señalan que a pesar de que produjo obras de una elevadísima calidad, no parece que recibiese influencia de algún otro pintor lo cual la convierte única en el estilo que desarrolló. Aunque fue encontrada hacia 1912 por el mismo coleccionista que descubrió a Picasso o Braque y se convirtió en la artista naïf de su momento, pronto calló en el olvido, cuando Uhde dejó de comprar sus obras al ser buscado por la Gestapo. Envuelta en la pobreza y en el olvido por todos, se convirtió en presa de la locura hasta el punto de acabar internada en un hospital psiquiátrico de Francia por psicosis. Su trabajo se vió envuelto en penumbra y se reflejó muy bien en sus obras, pero pronto dejó de pintar. Hacia 1942 murió de hambre en aquel hospital y fue enterrada en una fosa común entre miles de personas anónimas.
Edvard Munch
El artista definió a la locura, la enfermedad y la muerte como los ángeles negros que le persiguieron durante toda su vida. Aunque se dice que sufría de esquizofrenia nunca fue diagnosticado, aunque sí se sabe que padeció depresión. Era una persona introvertida, dada al alcohol quizá debido a la muerte de sus hermanas y su madre. La obra más conocida a nivel mundial de nuestro autor es El grito. Sobre ella, describió lo siguiente: Estaba caminando por un camino con ambos amigos. Se puso el sol. Sentí un ataque de melancolía. De pronto el cielo se puso rojo como la sangre. Me detuve y me apoye en una barandilla muerto de cansancio y mire las nubes llameantes que colgaban como sangre, como una espada sobre el fiordo azul-negro y la ciudad. Mis amigos continuaron caminando. Me quedé allí temblando de miedo y sentí que un grito agudo interminable penetraba la naturaleza.
Adolf Wölfli
Es el máximo exponente a nivel mundial del art brut o arte marginal, una corriente en la que las obras están desarrolladas por enfermos mentales sin conocimientos de pintura ingresados en hospitales psiquiátricos. Tuvo una infancia difícil y tuvo que convivir desde joven con el abuso sexual para quedar huérfano a la edad de diez años. Al tiempo fue internado en la cárcel por abuso de menores y cuando recuperó la libertad entró a un manicomio donde moriría. Fue en este momento de su vida donde comenzó a pintar. La geometría se impone y a veces parece hablar en boca del arte tribal. El horror vacui, o miedo al vacío, es una constante en sus composiciones. Al fin el historiador de arte Hans Prinzhorn se interesó por el arte desarrollado por las mentes con trastornos incluso desarrolló un Museo del arte patológico y dedicó su vida a estudiar las creaciones de los internos desde la perspectiva psicológica y artística.
Louis Wain
Es un ejemplo de aquellos enfermos mentales que contaban con formación académica y artística. Es conocido como el pintor de los gatos psicodélicos. Durante su trayectoria convirtió al animal como centro de su trabajo y su particular universo personificándolos incluso y dotándolos de conductas humanas. En su madurez fue diagnosticado de esquizofrenia y autismo. La última década de su vida estuvo interno en un psiquiátrico aunque eso no significó el fin de su vida como artista. Se observó una evolución muy interesante en su obra donde los animales iban adquiriendo una expresión de alarma y deformándose poco a poco con colores vivos e impactantes.