Las seis categorías principales en diseño de personajes

En el mundo del diseño de personajes, las categorías de los personajes se refiere a los diferentes niveles de realismo, o simplicidad, que utilizamos al realizar cada uno de nuestros personajes individuales, según el rol y la función de nuestro personaje en la historia que pretendemos narrar.

Existen seis categorías principales en el diseño de personajes.

• Icónico

Son personajes extremadamente simplificados, donde la geometría en su construcción es bastante visible. Tienen muy pocos detalles. Sus ojos usualmente son dos puntos negros sin pupilas lo que les resta expresividad. Algunos ejemplos son Mickey Mouse, Pocoyo, Hello Kitty, los personajes de Hora de aventuras o de Peppa Pig.

• Simplificado

Son, como los anteriores, personajes muy simplificados aunque sus rasgos faciales son algo más expresivos. Tienen muy pocos detalles y, como en los anteriores, podemos apreciar, con bastante facilidad, las geometría en su construcción. Este estilo se usa a menudo en las series de televisión. Algunos ejemplos los podemos ver en los personajes de Historias Corrientes, los Simpsons o Mr.Bean.

• Exagerado

Este estilo de personaje es mucho más expresivo que los dos anteriores estilos, y está diseñado para realizar actuaciones  muy caricaturescas y exageradas, son personajes diseñados para hacer reír solo con su aspecto físico. Generalmente se les diseña los ojos y la boca bastante grandes con el objetivo de poder realizar luego expresiones muy exageradas. Ejemplos de este tipo de personaje son el Coyote (Correcaminos), Scrat (Ice Age), los Rabbids o los Minions.

• Acompañante cómico

El acompañante cómico no transmite como el anterior el humor en su aspecto físico, sino que utilizan el diálogo y la actuación para crear situaciones cómicas.  La anatomía facial, por tanto, es menos exagerada. Aunque se trate de personajes cómicos también necesitan ser trágicos en algún momento de la narración, por ello su anatomía no debe ser tan exagerada como los anteriores. En la mayoría de las películas Disney existe el acompañante cómico. Son ejemplos de este estilo de personaje Mike Wazowski (Monstruos S.A), Mushu (Mulan), Asno (Shrek), Dory (Nemo), Sid (Ice Age).

• Personaje principal

Estos personajes son los protagonistas y por tanto necesitamos que el público conecte con ellos, por lo que deben poder expresarse como nosotros. Por ello, estos personajes se caracterizan por ser bastante realistas en su anatomía, expresiones faciales y actuación. Por lo tanto, en ellos se cuidan las proporciones, que deben ser más realistas y se aportan más detalles a la anatomía facial y corporal.

• Realista

Estos personajes son los que tienen un mayor nivel de realismo. Aunque conservan cierta caricatura en el diseño, es muy sutil. Son personajes con una anatomía bastante detallada. Para realizar este tipo de personajes es necesario tener un conocimiento amplio de la anatomía humana o animal dependiendo del tipo de personaje. Pertenecen a este estilo muchos personajes de cómics, videojuegos y algunos personajes de películas animadas y monstruos de películas. Ejemplos pueden ser Fiona humana (Shrek), muchos cómics de las editoriales DC y Marvel, los personajes de Assasin’s Creed o Golum (El Señor de los Anillos).

Es habitual que personajes pertenecientes a distintos estilos aparezcan en una misma película animada. Podemos encontrarnos en algunas películas hasta cuatro estilos distintos de personajes. Un ejemplo es Shrek, donde tenemos desde personajes pertenecientes al estilo realista (como hemos mencionado antes) como Fiona humana; personajes principales como Fiona ogro y Shrek; personajes como Asno que pertenecen a la categoría de acompañante cómico o Jengibre que pertenece al estilo más simplificado icónico.

Aunque si es cierto que, generalmente, los personajes más cercanos en la jerarquía de estilos irán mejor juntos que los personajes muy distanciados, como puede ser, por ejemplo, los pertenecientes al estilo simple y al realista. Pero también es cierto que existen muchas excepciones y que no nos debemos poner barreras a la creación, pues la experimentación puede dar lugar a trabajos muy interesantes.

Imagen- Francisco Kobo