Gracias a los programas de diseño AutoCAD, Revit o Rhino somos capaces de idear de una mejor forma cómo será la forma real de nuestra casa. Unos programas de 3D que casi nos permiten sumergirnos por los recovecos y espacios donde iremos colocando todo el mobiliario y demás objetos que pueblan un hogar a día de hoy.
Pero hay una firma noruega, Vardehaugen, que están usando su propio parking de la oficina para plasmar en el asfalto lo que será el plano de una casa o piso a través de cinta adhesiva y tiza. La mejor forma de que un cliente visita de forma casi fidedigna los espacios con los que contará cuando habite por primera vez ese piso o apartamento que se convertirá en su hogar.
Esta técnica permite a la firma y a sus clientes visualizar de forma directa los planos a una escala de uno a uno en vez de tener que interpretarlo a través de una pantalla a una escala menor. Uno de sus socios aprendió a dibujar a escala real en la Escuela de Arquitectura de Bergen. Lo describió como una forma más abstracta para entender un plano.
Después de convertirse en un arquitecto cualificado, Aasarod dijo que se dio cuenta que la noción de dibujar a escala real era bastante útil, no simplemente en términos de entender el plano, pero también en una nueva forma de comunicarse con los clientes. La habilidad para visualizar un piso es una importante parte de la profesión de arquitecto. Ambos sirven para evaular y comunicar los conceptos y soluciones al cliente final.
Trazar esos planos en el parking de su estudio les permite entender perfectamente el tamaño y proporciones de sus proyectos, lo que les permite afinar mejor los mismos y tener una sensación más real de las dimensiones y los espacios existentes.