La importancia de la coherencia visual en los trabajos de diseño gráfico es un factor indispensable para un acabado profesional. Al tratarse de un campo creativo, la comunicación visual requiere de coherencia para que el mensaje se trasmita de forma adecuada. Por eso es tan importante que los elementos seleccionados sean coherentes entre sí.
Tanto en el diseño de carteles como en logotipos, páginas web o incluso publicaciones de redes sociales, la coherencia es clave para mejorar la llegada y los resultados de lectura y apreciación por parte de la audiencia. En este artículo exploramos algunas claves para lograr la coherencia visual en el diseño gráfico y mejorar el impacto en la audiencia.
¿Qué es la coherencia visual en un trabajo de diseño gráfico?
La armonía y la consistencia en el uso tanto de colores, tipografía y logos forman parte de la coherencia visual de una campaña publicitaria en diseño gráfico. También de una campaña comunicacional, es decir, de todo aquello que se apunta a transmitir desde un producto visual. Se trata de poder mantener una estética uniforme y reconocible, a la vez que se refuerza la imagen y la identidad de marca en su conjunto.
Si las tipografías, los colores y los distintos estilos en un trabajo de diseño gráfico son consistentes, la coherencia visual facilita su lectura por parte de la audiencia. Sea está conocedora de las técnicas y recursos, o no. Un primer elemento a considerar son los colores consistentes, ya que añaden un factor psicológico a la lectura, recepción y entendimiento de los espectadores.
Colores consistentes y efecto psicológico
Los colores tienen un papel fundamental en cualquier trabajo de diseño gráfico y en la búsqueda de coherencia visual. Pueden evocar distintas emociones, sensaciones y llamar la atención del espectador en cuestión de segundos. La coherencia utilizando colores es esencial para el éxito de cualquiera de tus proyectos visuales.
Cada color tiene una psicología propia y puede evocar distintas asociaciones y respuestas en las personas. La construcción de estos significados varía culturalmente, y es esencial mantener la coherencia para que el diseño gráfico consiga los objetivos de acuerdo al público al que esté orientada cada pieza. El rojo, por ejemplo, es un color asociado con la pasión y la energía, mientras que el azul está orientado a la confianza y la calma. Si mantenemos una coherencia en la elección de colores, el impacto emocional de las piezas será mucho mayor y efectivo. Puedes conseguir una atmósfera y un tono adecuado para comunicar de forma efectiva tus mensajes.
También se pueden usar los colores para trasmitir valores y la personalidad de una marca o producto. Los colores consistentes son aquellos que reflejan los atributos y características, y se pueden combinar con diferentes variantes pero siempre con un mismo mensaje o valor a representar.
Los colores también aportan significados culturales y simbolismo. Estas construcciones pueden variar según cada sociedad y cultura, y por eso hay que leer muy bien al público objetivo antes de trazar una campaña o recurso de diseño gráfico.
Normas para mantener la coherencia visual en el diseño gráfico
Para mantener la coherencia visual hay distintas normas que se pueden adoptar de forma libre, pero consistente. Y el resultado es un producto de diseño gráfico cuidado, efectivo y artísticamente correcto. Mientras mayor rigurosidad haya en el uso de las normas de coherencia, mejores resultados obtendremos en nuestras campañas de comunicación y publicidad. Entre algunas de las normas que más se utilizan, además de la del color, encontramos las relacionadas con el logotipo y las tipografías.
Uso de logotipo para coherencia visual
Definir bien el logotipo es un inicio, su función principal es identificar la empresa o marca para el resto de la audiencia. Tiene que tener sus colores, proporciones y forma muy bien definidos para poder ser fácilmente reconocible por la audiencia.
Todas las manifestaciones de la marca deben tener el logotipo, y hay que tener una estrategia y una fuerte disciplina en su utilización. Además, debe contar con versiones acordes a cada tipo de soporte y así no se desvirtuará con el paso del tiempo y el salto entre una plataforma y otra.
Es importante, una vez definido el logotipo, establecer normas claras para su uso y configuración. En qué tipo de recursos gráficos va a utilizarse, posición, proporciones, espacio libre a su alrededor y otros criterios generales para su reproducción.
Uso de tipografías y cómo afectan el mensaje
La elección de una determinada fuente tipográfica por sobre otra, puede cambiar de manera determinante el mensaje. Como rasgo para mantener la coherencia visual, es recomendable nunca usar más de dos tipos de tipografía en un recurso gráfico. Una será la fuente para textos generales, y la otra para titulares. La primera debe ser legible en todo momento, y la segunda puede ser un poco más creativa y artística.
En Google Fonts encontrarás cientos de opciones para hacer combinaciones y escoger la que más te gusta. Una buena forma de aprovechar esta norma de coherencia visual es seleccionando pares de tipografías que ya está comprobado funcionan bien. Puedes ver ejemplos en Digital Synopsis y escoger las que mejor se adapten a tu propio estilo.
Fotografías en el contenido
Por supuesto que las imágenes y fotografías forman parte de la coherencia visual. El cerebro humano es capaz de procesar imágenes en poco más de 13 milésimas de segundo. Las imágenes directamente conectan con emociones y sentimientos variados, por eso su utilización es indispensable en una campaña comunicacional. La esencia de lo que comunicamos siempre está contenida en una imagen.
El potencial de las fotografías también ayuda entonces a que cualquier campaña de diseño gráfico, tenga una llegada más rápida y directa al público objetivo. Si mantenemos la coherencia visual en el diseño de la campaña, el resultado será mucho más efectivo y eficiente. Logrando un mejor posicionamiento de la marca o producto, o que el mensaje sea interpretado de forma correcta por un mayor número de personas. En definitiva, la coherencia visual en el diseño gráfico es un componente indispensable para que la campaña tenga una buena llegada al público.