El dashboard o cuadro de mandos o panel de control, es una herramienta visual par representar datos clave de tu empresa o proyecto. Muestra de manera simple y concisa lo más importante y las tareas asignadas a cada área, permitiendo rápidamente la toma de decisiones y análisis de tendencias en un entorno laboral. Para crear dashboards efectivos, la elección de una buena paleta de colores es muy importante.
Al tratarse de una herramienta visual, la disposición y selección de colores es fundamental porque determina fácilmente la identificación de uno u otro agente o área. Su función principal es mostrar indicadores clave de rendimiento, así como otras médicas de relevancia para la empresa o sector. Por eso, para crear dashboards efectivos, además de organizar la información que se va a recopilar y mostrar, hay que escoger una paleta de colores adecuada.
Combina los colores de manera adecuada para crear dashboards efectivos
Los expertos en análisis, marketing y diseño coinciden en que una buena paleta de colores influye en la creación de dashboards efectivos de manera rotunda. Para la conformación de un panel de control, se requiere convertir información en bruto en indicadores y respuestas a distintas interrogantes. Luego, con esa información visualmente expuesta, se puede proceder a tomar una acción al respecto.
El paso de selección de color, si bien puede parecer accesorio para algunos usuarios, es en realidad parte fundamental de la identidad de tu dashboard. Seleccionando correctamente una paleta de colores crear dashboards efectivos se vuelve más sencillo, porque puede facilitar la lectura de determinados indicadores, permitir un reconocimiento rápido de parámetros y eliminar distracciones.
Los esquemas de color en un dashboard no solamente responden a fines estético, también lo hacen a fines prácticos. Podemos diferenciar información de un cuadro, organizar las columnas o sectores para datos numéricos y escritos, o lo que el diseño requiera. En líneas generales, un equipo de aplicación puede brindar tres mensajes diferentes solamente mediante los colores en un cuadro de mando.
- Codificación de cantidades.
- Indicar agrupaciones para los datos.
- Generar contraste y guiar la atención a conceptos y datos clave.
Diferencia entre paleta de colores y esquema de colores en dashboards efectivos
La paleta de colores es un conjunto específico de colores que se seleccionan para usar sobre una zona específica. Se incluye una gama de colores (pueden ser primarios, secundarios y de acento) y se busca que combinen de manera armoniosa para que el diseño no sea llamativo por cuestiones estéticas mal elegidas. La paleta sirve como una base de datos de todo elemento visual presente en el cuadro de mando, garantizando así la coherencia no solamente en la interfaz, sino entre cualquier elemento que deba incluirse. Es una suerte de caja de herramientas de los colores que se usan en la creación de tu diseño.
Combinación de colores. El esquema de color consiste en aplicar estratégicamente los colores seleccionados en la paleta. Permite trabajar la disposición y el uso planificado de los distintos colores, pudiendo así elegir cómo se trasmite la información, remarcando datos clave y guiando la atención del usuario respecto de los mensajes que se busca compartir. Los colores de la paleta entonces se aplican a diferentes elementos del informe, desde cuadros hasta gráficos, porciones del texto o fondos. La estrategia más efectiva permite hacer contrastes visuales por jerarquía y así generar una identidad sólida.
¿Qué elementos conforman los dashboards más efectivos y su creación?
Primero que nada, un dashboard o panel de control será más efectivo siempre y cuando mantenga una cierta coherencia respecto de los colores que usa. Se debe garantizar que el usuario pueda comprender de manera intuitiva lo que cada color representa dentro del esquema. Así, el diseñador puede elegir que el verde represente cifras de crecimiento y el rojo caídas. Este ejemplo, uno de los más básicos, también hace que la lectura del informe sea más rápida, pudiendo identificar rápidamente los momentos positivos y negativos de una actividad, por mencionar una aplicación de los dashboards.
Contrates y accesibilidad al contenido
Mediante una buena selección de esquema de color para cuadros y gráficos, el usuario puede hacerse en cuestión de segundos y con solo un vistazo, de lo más relevante. La utilización del contraste ayuda a que el lector lea más fácilmente los datos que se exponen. Si aplicas un contraste alto entre fondo y texto, o entre distintos puntos de datos, se reducen las confusiones y se logra una lectura más directa. El objetivo con los dashboards efectivos es que los usuarios entiendan la información, incluso si tuvieran dificultades o deficiencias en la visión cromática.
Contexto y finalidad del dashboard
A la hora de seleccionar la combinación de colores ideal, es importante resaltar el objetivo y el contexto en el que se arma un determinado cuadro. Los colores pueden seleccionarse en base al tipo de contexto de los datos. Un ejemplo concreto: para armar cuadros de rendimiento financiero, se puede usar una paleta de colores con verde y rojo, dos colores asociados al dinero y a su representación positiva y negativa respectivamente. En un cuadro de mando sobre salud, predominan los azules y verdes, de nuevo como marcas de referencia visual y de rápido reconocimiento para los usuarios.
Enfoque y énfasis en la información
Los dashboards efectivos son aquellos que tienen claro el enfoque de la información, la exponen claramente y su lectura no da lugar a malas interpretaciones. El uso de un color más vivo o llamativo, responde a la necesidad de centrar atención en determinada cifra. Pero esa decisión dependerá en una última instancia de lo que se busque expresar. Pueden elegirse colores más apagados para datos que pasan más desapercibidos, y tonalidades llamativas par aquello en lo que se quiere poner mayor énfasis.
El impacto psicológico
Como toda herramienta visual, el impacto en la mente del espectador es relevante. A la hora de diseñar un dashboard hay que pensar en lo que se busca trasmitir y en la sensación que se quiere dejar en el lector. Si es urgente, una emoción fuerte y de acción inmediata. Colores acordes. Si se busca generar calma y pausas para pensar, colores más apagados.