Cualquier proyecto creativo que se tenga entre manos, tiene que pasar por el proceso de elaborar un moodboard. Para encontrar un estilo visual único y con coherencia, llevar a cabo un moodboard, es una de las fases más complicadas pero también es la parte en la que se encuentran lo elementos que van a diferenciar una marca de otra.
En este post, queremos hablarte de esta técnica creativa, que nos lleva a elaborar un universo visual por medio de referencias y además, te mostraremos ejemplos de moodboard, para que comprendas de una manera visual de lo que estamos hablando.
Los moodboard, suelen estar formados por fotografías, colores, texturas, tipografías, recortes, etc, un conjunto de referencias que nos inspiren y estén dentro del cauce de los valores que queremos transmitir.
¿Qué tiene de bueno el uso de moodboard?
No solamente esta técnica se usa en el mundo del diseño, también se utilizan para diseño de interiores, organizar un evento, para colecciones de moda, sesiones de foto, etc. En resumen, en cualquier proyecto que tenga representación visual.
Se trata de una herramienta clave en los procesos creativos, es una técnica muy útil, ya que por medio de ella se asientan las bases de la identidad visual con la que se va a trabajar. Es una forma más dinámica, dentro del proceso de investigación y documentación, que hay que hacer antes de la fase de diseño.
Como te señalábamos anteriormente, el primer paso previo a empezar a componer el moodboard es tener una idea clara de lo que quieres conseguir con la marca con la que estas trabajando, con una idea básica la búsqueda de elementos estará más enfocada.
Otro aspecto a recalcar, es que no todo lo que se añade en un moodboard, aparece en el diseño final. Es decir si has seleccionado 3 colores, no tienen por qué aparecer todos, estos te proporcionan una guía de la paleta que mejor encajan con la personalidad de la marca.
Mejores ejemplos de moodboard
Como ya hemos mencionado, la técnica de moodboard te permite extrapolar las ideas que te da la marca hacia los clientes, o para mera inspiración personal. A continuación, te mostramos algunos ejemplos diferentes para que te sirvan de inspiración.
Moodboard diseño de interiores
No tenemos que ser profesionales del diseño gráfico o de interiores para poder trabajar con esta técnica, cualquier usuario puede hacerlo cuando lo que está buscando es inspiración para un proyecto, ya sea redecorar una habitación, crear una obra o hasta un cambio de look.
En este apartado, los moodboards de diseño de interiores son unos de los más comunes que podemos observar, en ellos aparecen elementos que tiene que ver con decoración, texturas, colores, mobiliario, etc. Solo hay que reunir imágenes que nos entusiasmen y cuadren con nuestras ideas.
Moodboard sobre moda
Moodborad y moda, son dos elementos que van de la mano, es una herramienta indispensable en este sector a la hora de preparar las colecciones. Son los diseñadores y su equipo, los encargados de crear collage reuniendo diferentes imágenes, telas y colores que muestren la inspiración para las prensas textiles. Esta manera de visualizarlo, ayuda a dar vida a las piezas, a saber como pueden quedar antes de la confección.
Como hemos dicho, los elementos que aparecen en la concepción de los moodboards de moda son, telas, texturas, colores, remates, bocetos tanto de las ropas como de modelos, fotografías, inspiración de maquillajes, etc.
Moodboard en publicidad y diseño
En el sector de la publicidad y las artes gráficas, esta técnica es uno de los primeros pasos que se dan, ya que por medio de ella se reúne toda la información que los clientes han proporcionado al equipo de diseño sobre cómo son, qué son y qué quieren transmitir.
Es una técnica creativa muy visual que ayuda a bajar la idea a la tierra, gracias a los diferentes elementos que lo componen. Ayuda a mostrar a los clientes de una manera física y visual, por donde va a ir el trabajo, la idea. El moodboard, es el punto de inicio del concepto y lo que va a dar paso al diseño final.
Crear un moodboard te llevará tiempo, pero lograrás construir un guía visual que te ayudará a marcar un concepto y ver como será el resultado final. Es la manera más rápida y práctica de mostrar de una manera visual, de comunicarte visualmente con los clientes, con ayuda de esta colección de elementos puedes mostrar la dirección en la que va el proyecto.
Cuando se comienza en un proyecto, lo primero son todo palabras, papeleo y conceptos, que pueden incluso hasta llegar a ser confusos. Gracias al moodboard, aterrizas esas ideas que surgen en la entrega del briefing y te permite visualizar los conceptos de los que se hablaban, con un estilo gráfico.
Herramientas digitales para hacer un moodboard
Existen multitud de opciones para crear moodboards, desde la manera manual, recortando revistas, periódicos, materiales y demás, hasta herramientas para hacerlo de manera digital.
Illustrator o Photoshop son unos de los programas de diseño más usados para el diseño de moodboard. Se pueden acomodar las imágenes de manera libre, elegir tamaños, escribir conceptos clave en cualquier parte, añadir diversos colores, etc.
Si eres de los que ama Pinterest, es una de las plataformas en las que más referencias puedes encontrar, a parte de en los bancos de imágenes. Solo tiene que crear un tablero, y empezar a guardar todas las imágenes en él, tanto de Pinterest como de otras webs.
Niice o Moodboard Lite, son dos plataformas que han sido creadas de manera especifica para elaborar de manera fácil moodboard. Lo mismo ocurre con Dragdis, con una cuenta en esta plataforma solo tendras que arrastrar y soltar todos los elementos que te sirvan de inspiración.
Como puede ver, existen muchas maneras para crear un moodboard, solo hay que elegir la forma en la que uno se sienta más cómodo. Hay quien prefiere todo digital, y otros quien prefieren tenerlo de manera física y poder tocar.
Si quieres experimentar con ideas visuales de una manera muy rápida, la técnica moodboard, es la indicada, ya que hace mucho más liviano y divertido todo el proceso de investigación y búsqueda de referencias.
Te animamos a que empieces a probar, recortes, arranques, pegues… seguro que consigues encontrar tu lado más creativo mientras te diviertes.