El evento del automóvil más famoso y espectacular del mundo también cuenta con una imagen corporativa. Este evento que se juega alrededor del mundo y que cuenta con millones de aficionados mantiene una trayectoria grandiosa a lo largo de su historia. Existen muchos otros deportes así, como el Tenis o incluso MotoGP pero el despliegue de la Fórmula 1 es inigualable. El logotipo de F1 ha sido modificado pocas veces, pero vamos a analizarlo.
Seguro que muchos de los lectores de Creativos Online también son fanáticos de la velocidad. Es por ello que hemos decidido analizar este logotipo a lo largo de sus más de 50 años de historia. Aunque para muchos pueda ser poca historia, debemos tener en cuenta que se tratan de coches de alta velocidad. De los cuáles no llevamos muchos años conociendo, eso sí, tampoco sabremos donde está la velocidad máxima a las que no podrá sorprender la F1.
¿Cómo nace la F1?
Este nombre no tiene mucho misterio. Ya lo escribas como F1 o Fórmula 1, esto nace en el año 1959. Desde ese año, organiza eventos a nivel mundial de coches de alta velocidad con equipos de presupuestos cada vez más elevado. Todo tipo de marcas de coches han estado ligadas a este deporte y han ido añadiéndose más desde entonces. Marcas icónicas como Ferrari o Masseratti que, junto a grandes pilotos han ganado miles de premios.
El nombre de Fórmula 1 se debe a que la manera de inscribir las reglas de la propia competencia y el campeonato eran estrictamente formuladas. El logotipo de F1 como lo conocemos hoy ha ido variando según los años. Pero en esta ocasión han sido solo cuatro veces. De las cuáles, dos han sido cambios más significativos y los otros algo más continuistas con respecto a los anteriores. Aunque podemos decir que la primera imagen no se trataba de un logotipo al uso, más bien de una pancarta.
La primera imagen corporativa de F1
Como hemos comentado, el primer logotipo ni siquiera tenía unas reglas de diseño. Era más bien una pancarta que bien podría servir de punto de partida de un Gran Premio. En esta primera imagen podemos ver, por un lado, el acrónimo FIA. Este acrónimo pertenece a la llamada Federación Internacional del Automóvil. Esta federación es una organización sin ánimo de lucro que nace en Francia y que trata de regular las normas de los campeonatos automovilísticos.
Esta federación no solo regula los coches o las reglas sobre las que la responsabilidad cae sobre el conductor o mecánicos. También rige las leyes sobre el propio campeonato. Carretera, medioambiente, seguridad vial… entre otras. A la izquierda de estas siglas, podemos ver lo que si es un logotipo. Este logotipo pertenece a la imagen corporativa de FIA. Podemos ver, de alguna manera, como se trata de una esfera con todos los continentes del planeta, aunque con poca legibilidad. Este logotipo ha sido modificado por uno más actualizado ahora.
El resto del primer logotipo de F1 pone «World Championship» y «Formula One». Que se viene a referir a Campeonato Mundial y Fórmula 1, que es el nombre del que venimos hablando. De esta forma se establece un primer nombre que daría pie a los siguientes logotipos. Este logotipo nace en 1985 pero pronto se sustituye por una imagen más brillante y acorde con la imagen de una empresa de este nivel.
El primer logotipo de F1
Este primer logotipo fue más formal y visible. Sus líneas eran más claras y tenía mejor escalabilidad que el anterior. Tanto el texto que tiene como la colocación lo hacen más funcional a la hora de reproducirlo en diferentes circunstancias. Este logotipo, como podemos ver en la imagen se compone de cuatro escalones. Cada uno de ellos en un tamaño descendente, donde el primero se hace protagonista sobre el resto.
Lo primero son la siglas FIA, que sigue cobrando importancia sobre Fórmula 1. Un reclamo así, de que pertenece a una gran sociedad que lo hace creíble, pero que lo desliga de una marca única que vibra sola. Este mismo logotipo ya cuenta con una imagen superpuesta de un coche de fórmula 1, muy parecido a los actuales. Donde los neumáticos juegan un papel fundamental para formar parte de la palabra FIA.
Separado por líneas amarillas que llaman la atención sobre un texto en negro, se encuentra todo lo demás. Por escalones, primero Fórmula 1 y después World y Champions, respectivamente. Aunque World tiene mucha más presencia debido a que al tener menos letras y querer encajarlo en el mismo encuadre, debes agrandar las letras. Eso es un defecto que poca autonomía da al formato y parece más importante un aspecto frente a otro.
Un logotipo icónico
A pesar de un cambio tan repentino entre la primera imagen y el primer logotipo oficial, donde solo pasó dos años, el siguiente no duraría tampoco demasiado. Y es que seis años después, en 1993 nace el logotipo más icónico de todos los tiempos del deporte automovilístico. De hecho es tanto así, que dura hasta el año 2018 donde se modifica por el que tenemos actualmente. Pero hasta entonces, todos podemos reconocer un logotipo que queda para la posteridad.
Este logotipo ya tiene identidad propia. Se aleja de lo meramente corporativo y escoge una imagen con garantías. Donde además de nacer el concepto de «F1», recoge los colores y formas que evocan una imagen relacionada con el deporte de velocidad. Recogiendo los tres colores más representativos para una marca así, que se componen del negro, blanco y rojo. Estos dos primeros son esenciales, pues mucho de la marca va con ellos.
Ya que la bandera de final de carrera se compone de estos dos colores en un formato a cuadros. Por lo que tiene sentido que F1 tenga estos colores. Además de colocar una letra en cursiva, lo que añadido a un rojo que pierde densidad, evoca velocidad en el logotipo. Este rojo también tiene sentido al reconocerse como un color que alude, según la psicología del color, a pasión, fuerza, emoción y pasión entre otras. Algo que recoge sin duda la fórmula 1.
Una actualización de marca
Este nuevo logotipo está rediseñado en 2018. Mejorando criterios en cuánto los nuevos formatos digitales para adaptarse a ellos. Además de realizar un diseño minimalista y moderno, pero que a la vez lo hace brillante y con una mirada al futuro. Este logotipo tiene el rojo brillante que recoge de la bandera del logo anterior, pero esta vez lo hace protagonista. La «F» se inclina hacia adelante y ocupa gran parte del logotipo con una línea transparente en el medio con lo que resulta un circuito.
El 1 que sale también inclinado y sin más composición que una línea vertical. Haciendo en su conjunto un logotipo dinámico y con vida propia, pero sin perder mucho la esencia con respecto al logotipo anterior.