Llamar por teléfono es una práctica habitual desde hace décadas. Desde los primeros dispositivos enormes, que pasaban por una centralita al estilo «Las chicas del cable», hasta el smartphone actual. Depende de cada país, la imagen de antaño de un teléfono tiene diferentes perspectivas. En el caso de España, el logotipo de telefónica se hace muy reconocible por la importancia que tuvo en los primeros años de la comunicación.
Desde los años 1924, cuando se constituyó como empresa, lleva proveyendo de líneas telefónicas a muchos usuarios. Primero, como una compañía de telefonía pública de un país y ahora, siendo una de las más importantes a nivel mundial. Nada más y nada menos que la cuarta con mayor base de clientes y la sexta con mayor capitalización del mercado de la telefonía.
¿Qué es Telefónica?
Esta se trata de una empresa cuyo nombre principal era «Compañía Telefónica Nacional de España». Una empresa que nace como parte estatal y pública para proveer a los usuarios del país de comunicación telefónica. Nace en Madrid y su evolución ha sido una constante desde entonces. Ya que ahora, como muchos usuarios saben, la marca de telefónica tiene una presencia mayor a nivel de Europa y América.
Además de todas las compañías que ha ido creado desde entonces, con servicios de telefonía. Como la conocida Movistar, O2 y Vivo. Cada una representando a un mercado distinto, como el Español, Europeo y Latinoamericano, incluido Brasil donde Vivo opera. Es por ello que esta compañía ha tenido, desde entonces, multitud de cambios a lo largo de su historia en cuanto al logotipo e imagen comercial que vamos a analizar aquí.
Compañía pública, logotipo de país
Por aquél entonces, en el año 1924, los logotipos eran escudos representativos de la compañía. Únicamente se utilizaban de forma esporádica y en formatos más formales. Como la firma de documentación, algún tipo de enfoque más institucional pero con poco escalado. Es por eso que podemos ver un logotipo con tantos elementos, en blanco y negro y que no exprese mucho con respecto a la marca.
De hecho, podemos ver como lo más representativo es que España aparece remarcado, como una compañía del Estado y el nombre en la silueta circular «Compañía Telefónica Nacional de España». Todo en blanco y negro, además de una pequeña marca para señalar las Islas Baleares pero donde no se encuentra las Islas Canarias. Sin embargo, a pesar de su poca utilidad en la aplicación, la compañía no modificó ningún ápice del escudo por más de 50 años.
Y es que por entonces, la compañía no era precisamente una marca que saliera al mercado para competir. La empresa pública proveía de un servicio que se volvía cada vez más esencial. Sin competencia ni publicidad para que elijas que servicio o no elegir, no le hacía falta. Hasta que en este mercado, empezaron otras compañías a introducirse en él.
El primer cambio a un logotipo de marca
En 1984, justamente 60 años después de su inicio, se realizó el primer cambio a un logotipo más reconocible. Este ya sí, no solo era una empresa estatal, sino que ya era una empresa con diferentes clientes y que ofrecía diferentes servicios. Su logotipo no iba a ser otro que la imagen numérica del reconocible teléfono de cable. La suma de 10 puntos en forma de «T» de Telefónica.
El logotipo de 10 puntos tenía un color verde claro. La tipografía de Telefónica era una Sans básica en mayúsculas con el punto de la «i» en color verde, a juego con el símbolo. Algo muy sencillo y reconocible que duró poco de esta forma. Pues unos meses después, encajaron el logotipo de puntos dentro de un círculo azul. La palabra, por varios meses desapareció y solo quedaba ese símbolo.
Meses después, reaparece la tipografía con una mayor identidad. Claramente el símbolo nuevo no era tan reconocible sin las letras aún. La tipografía era más elaborada y gruesa y se encontraba en minúscula a excepción de la letra «T». La cuál tiene más protagonismo a lo largo de su historia. Este nuevo logotipo ya resultaba más aplicable para todos los formatos en los que se imprimía todo aparato.
Unos cambios antes del logotipo actual
En 1993, el logotipo sufrió una modificación peculiar. Puesto que eliminan los colores azul y verde de la marca. Algo característicos ya que todas las cabinas que podíamos encontrar por la calle tenían estos colores. Los colores se hicieron protagonistas del símbolo, tanto de la «T» como del círculo que lo rodeaba. La formación del mismo también cambió, haciendo más informal y cercano el logotipo. En un movimiento que llamaba a las nuevas generaciones.
Los puntos superiores, de izquierda a derecha, se veían de mayor a menor. Y de arriba hacia abajo pasaban de un amarillo claro a un azul más oscuro. Todo esto, símbolo y tipografía fueron resueltos con una cursiva, que hoy muchas personas reconocerán impreso en sus primeros teléfonos por cable. Este impreso, en muchos de ellos no tenía color, pero la forma era reconocible en cada hogar, al menos en España.
Después de esto, en 1998, la empresa vuelve a sus colores tradicionales de verde y azul. Eso sí, en este cambio se elimina el isotipo y solo existe el nombre. Esta tipografía se hizo en formato «handwriting», en minúscula a excepción nuevamente de la «T». La unión de la «O» y la «N» hacía simular la tilde que no aparecía en el primer símbolo de 1984.
Logotipo actual
En 2010, la empresa deja de vender en su nombre y recurre a filiales para dar diferentes tipos de servicio. Es así como Movistar, O2 o Vivo aparecen en escena y se dedican a la venta de los productos. Así, Telefónica queda como una matriz de todas ellas y se dedica a temas más corporativos dentro de la marca. Su reciente cambio en 2021 va en esta sintonía y recurre al primer logotipo para ser más reconocible en el mercado.
En esta ocasión, el logotipo es más limpio, con unos colores más amables y acordes con su tiempo. Volviendo a los puntos de antes, de esta forma han simplificado mostrando solo 5 puntos. Así, se hace igual de reconocible pero con un aspecto visual más consistente y escalable a los formatos digitales de ahora.