El proceso de rediseño por lo general no es del todo fácil, ya que existen ciertos momentos en los cuales los equipos y los individuos deben optar por rediseñar todo de nuevo o insistir con el producto actual.
Aquí te mostraremos dos opciones para que veas la diferencias entre rediseño y reiterar y porqué es mejor evitar el rediseñar todo de nuevo.
Rediseño desde el comienzo
El rediseño de todo el producto no se debe evitar siempre, ya que en ciertos casos, alguna empresa podría heredar cierto producto sencillamente por el nombre de dominio, la base de usuarios o debido a que perciben el potencial que existe en reorganizar totalmente el producto comenzando desde cero, para crear algo totalmente distinto.
Un claro ejemplo sobre un producto que fue totalmente rediseñado desde cero sin duda es Bebo, aquello que antiguamente fue una red social con un veloz crecimiento, es en la actualidad la suma de varios nuevos productos, que surgieron como el resultado del total rediseño del producto original.
La dificultad con el rediseñar todo de nuevo, es que supone el peligro de terminar enloqueciendo a los usuarios. En algunas ocasiones, el producto llega a tener un diseño de muy bajo rendimiento y aun así UX, lo permite como el principal curso adecuado para la acción, el problema viene cuando se rediseñan productos por una razón poco valida y no porque en realidad sea lo mejor para dicho producto.
Es primordial hacerte 2 preguntas para reflexionar acerca de esta decisión:
- ¿Mi visión para el producto está chocando notablemente con el diseño y el marco que actualmente tiene?
- ¿El producto actual cuenta con varias dificultades de diseño y UX para sus usuarios?
Si tu respuesta es afirmativa, es posible que esto sea la trayectoria más adecuada. Sin embargo, si piensas que el rediseñar un producto podría ocasionar pérdidas de varios usuarios, responderte a ti mismo si eso podría hacerte cambiar de opinión y deshacerse de la preocupación que tengas.
En ciertos casos, únicamente una pequeña porción de los usuarios existentes, son los que en realidad se encuentran completamente en contra del cambio, es por ello que debes pensar muy bien si realmente el rediseño es la mejor opción para hacer que el producto avance.
Sólo debes cerciorarte de que en realidad estás haciendo que el producto avance y evolucione al optar por un rediseño desde cero.
Rediseño en iteraciones
Generalmente esta debería ser la ruta que se tome, ya que al repetir frecuentemente algún producto, se puede prevenir la alienación de la base de los usuarios actuales, ya que de esta manera puedes introducir de forma lenta pero segura las nuevas mejoras de UX y UI que desees hacer en cada una de las versiones del producto. Este método es mucho más sencillo de digerir para la gran mayoría de usuarios y por lo general es ideal para prevenir que se cambien hacia el producto de la competencia.
Igualmente permite que se elimine alguna característica, si se logra demostrar que ésta en realidad no es eficiente o provechosa tanto para los nuevos usuarios como para los que ya usaban el producto.
Un claro ejemplo de productos reiterados, es el producto de búsqueda principal de Google, el cual se puede decir que nunca ha sido rediseñado totalmente y en su lugar ha sido iterado frecuentemente desde hace algunas décadas. Google, cuenta con un producto sorprendentemente complejo, sin embargo, posee una interfaz bastante sencilla, la cual ha sido reiterada poco a poco, hasta que en la actualidad se ha convertido en un producto que es notablemente refinado, poderoso y además se utiliza de forma sencilla.
Con este ejemplo es posible observar cómo el producto ha ido progresando, pasando de ser algo anticuado, hasta tener un diseño que lo convierte en uno de los productos líder de una industria.