Las tres dimensiones son el largo, el ancho y la profundidad de una imagen. Lo cierto es que tan solo la realidad es tridimensionalidad, ya que es allí donde los cuerpos tienen volumen. Los ordenadores sólo pueden simular gráficos en 3D, porque es un soporte bidimensional donde la imagen tiene tan solo dos dimensiones: alto y largo.
Lo que denominamos como diseño 3D no es más que una técnica utilizada para la creación de objetos que simulan volumen. La animación en 3D consiste en dar movimiento a un objeto diseñado con esta técnica durante determinado período de tiempo y es que generar objetos aparentemente tridimensionales no es un invento nuevo. A finales de la década de 1890, William Freese-Greene, considerado un pionero del cine, patentó el primer sistema cinematográfico en 3D, pero no tuvo éxito debido a lo complejo del mecanismo.
Relevancia y aplicaciones del 3D en el diseño gráfico en la actualidad.
Actualmente conocer y manejar el diseño 3D es lo que se pide a muchos diseñadores gráficos, debido a su gran utilidad ya que aumentan el arsenal de recursos disponibles y suelen ser el camino más directo para conseguir la imagen plana deseada.
En la pasada década el número de aplicaciones del 3D ha aumentado de forma exponencial y la relevancia de estas técnicas iba cobrando cada vez mayor protagonismo dentro del mundo del diseño gráfico.
La tecnología del 3D no se inventó con Avatar, lleva descubierta y desarrollándose desde hace mucho más tiempo del que te pueda imaginar. Y los diseñadores gráficos llevan aplicando esta técnica a sus creaciones desde hace bastante tiempo, sin ir más lejos el IMAX es una prueba de ello.
Pero como ironizaban los personajes de la película Dogma: “Nada es conocido hasta que se hace una película sobre ello”, y eso es en parte lo que ha pasado con la tecnología 3D, junto con la necesidad de inventar nuevas fórmulas para llevar al público a las salas de cine. El estreno de grandes producciones realizadas con esta tecnología es lo que la ha llevado a estar en boca de todos.
Un gran público que, satisfecho por los resultados, demanda cada vez más material realizado en 3D. Así que todos contentos, las grandes productoras, el público y todo un nuevo mercado de televisores y video consolas con este sistema.
La tecnología del 3D no se inventó con Avatar
Este es el principal motivo por el que grandes empresas de diseño gráfico de todo el mundo se hayan volcado a desarrollar y potenciar esta tecnología, colocándola como máxima prioridad en sus proyectos de negocio. Aunque en la actualidad la mayor aplicación de esta tecnología está relacionada con el ocio y el espectáculo, poco a poco las empresas de diseño gráfico orientadas a sectores como la moda, la publicidad o las presentaciones gráficas para empresas, están incorporando esta tecnología como parte integral de sus proyectos.
Si observamos la creciente oferta de productos asociados a esta tecnología y la objetiva demanda de diseñadores gráficos conocedores de esta técnica, podemos concluir sin lugar a dudas de que el 3D ha llegado para quedarse.