Que el mundo del diseño tiene su lado oscuro no es una novedad, pero tampoco podemos negar que la vida de todo diseñador gráfico también cuenta irremediablemente con momentos bastante cómicos. Seguro que si te dedicas a este mundo has vivido una gran cantidad de situaciones que difícilmente olvidarás. Hoy me gustaría compartir con vosotros una reproducción bastante fiel de la realidad (a rasgos generales eso sí) en el tipo de relaciones que suelen darse entre el profesional y el cliente. Se trata de un vídeo en el que se describen de una forma muy gráfica los apuros y comederos de cabeza que acechan al diseñador a lo largo del proceso y elaboración de un trabajo.
Por fuerte que parezca, a veces comunicarnos eficazmente con nuestros clientes puede ser mucho más difícil que desarrollar el proyecto en cuestión. Ante todo, yo desde aquí os recomendaría que afrontéis este tipo de situación con el mejor humor que os sea posible, aunque eso sí, con ciertos límites. Lo normal es que nos topemos con personas comprensivas y respetuosas, pero también puede darse esa ocasión donde tenemos que lidiar con personas más o menos desagradables. En estos casos, no debemos olvidar cuales son nuestros derechos y nuestros límites aunque repito, siempre tratando de resolver las pequeñas problemáticas en un ambiente lo más relajado posible.
Sin más que decir a continuación os dejo el vídeo, estoy seguro de que os sacará más de una carcajada. ¿Te sientes identificado con este micrometraje? Si es así, cuéntamelo en la sección de comentarios.
4 comentarios, deja el tuyo
No puedo ver el video, ya hemos eliminado Flash en la oficina. :-(
Pues sí, a veces es así… Mejor tomarlo con humor!
Lo mejor es cuando simplemente dicen: dale una vuelta ;)
Muy bueno, me ha pasado varias veces.