Hace ya algún tiempo, cuando no existía internet, las noticias solo se conocían si leías el periódico o las revistas. Artículos como este que estás leyendo, se auto publicaban, se imprimían, fotocopiaban e iban de mano en mano. No había internet pero si fanzines.
Si aún no conoces que es un fanzine, no te preocupes, en esta publicación te vamos a contar todo lo que necesitar saber sobre ello y además te mostraremos diferentes ejemplos.
El fanzine, es una manera que surge para compartir ideas o pensamientos con el resto del mundo. Este formato supone un proceso de experimentación con la creatividad para los diseñadores.
¿Qué significa fanzine?
Ese término viene de fan y magazine. Suele tratarse de una publicación artesana como una cartilla, ya que normalmente tienen esa forma. Puede estar realizados por un miembro del mundo del arte, en el que se tratan temas de artes, culturas, música, entre otros.
El origen de este tipo de publicaciones se remonta a los años 30, cuando se hacían intercambios epistolares entre los amantes de la ciencia ficción. Con el paso de los años y la evolución tecnológica, su reproducción fue volviéndose cada vez más sofisticada.
A lo largo del tiempo, los temas que se trataban en dichas publicaciones eran temas políticos y de protesta. A partir de los años 70, comienzan a surgir portadas con un sentimiento de protesta y rebeldía.
Ya llegados a los años 80, en Reino Unido con la cultura punk es cuando el fanzine comienza a adquirir una estética muy personal. Se inicia una experimentación con tipografías, diferentes texturas, colores, y otros elementos de diseño.
Los fanzine en esta cultura punk, fueron tan influyentes, que inspiraron a muchos músicos del momento y absorbieron elementos gráficos de estas publicaciones para sus portadas de discos.
Los primeros fanzines estaban hechos con recortes de revistas, que se colocaban y pegaban sobre una hoja de papel y se les añadía textos. Estos textos, podían ser escritos a mano con diferentes elementos o construidos con recortes. Si se necesitaba color o ilustraciones podían hacerse de la misma manera, a mano o con recortes. Las opciones son ilimitadas cuando se trata de hacer un fanzine.
A día de hoy, estas publicaciones caseras se hacen de la misma manera, incluso pueden tener diferentes formas como de revista, pequeño libro, tarjeta personal, etc. No solo varían de tamaño, si no que las técnicas también pueden ser diferentes.
Son piezas editoriales producidas de manera artesanal e independiente, para amantes de un tema o como medio para dar a conocer tus ideas. Cada vez son más los diseñadores, que utilizan este formato para dar a conocer sus trabajos.
Son objetos de mucho valor para sus creadores y para los lectores, ya que se trata de publicaciones con tiraje limitado. Todo el proceso de diseño y distribución, corre a cargo de su creador.
A día de hoy, con el desarrollo tecnológico que tenemos a nuestro alcance, la impresión de estas publicaciones tienen una mayor calidad y además pueden diseñarse digitalmente.
¿Cómo hacer un fanzine?
Si después de conocer qué es, estas interesado en saber cómo hacer uno sin mucha complicación, a continuación te echamos una mano.
Como hemos dicho, un fanzine puede tratar diferentes temáticas, ya puede ser una publicación sobre ideas religiosas o una expresión del arte personal.
Como todo diseño editorial, antes de nada hay que pasar por un proceso de investigación, para continuar después con el proceso creativo. Uno de los mayores puntos positivos de estas publicaciones, es que se puede hacer como nos dé la gana, no hay normas, ni límites.
El primer paso que deberás dar es definir el tema del que vas a hablar. Lo bueno de estas publicaciones, es que promueven la libertad de expresión, así que ningún tema se vuelve tabú.
Como norma general, este tipo de formato solamente suelen tener ocho páginas, así hay que tener este en mente para crear un contenido breve y conciso.
Una vez tengas definido el tema a tratar, es momento de empezar la fase de documentación. En esta fase escribirás, dibujarás, recortarás, etc. Tienes que elaborar y organizar el contenido de la publicación.
Cuanto más material se tenga, más fácil resultará la elección del idóneo. Es bueno tener más material del necesario, así te exigirás más a ti mismo a la hora de encontrar lo mejor para tu trabajo.
El siguiente paso que debes seguir, es el realizar un listado con todo el contenido del que quieres hablar en el fanzine. Esto te ayudará a saber qué información es más importante que otra.
Este guion, también sirve de ayuda para ordenar las ideas en un orden determinado. Es decir, de que vas a hablar antes y después.
Cuando ya tenemos el tema, el material y el guion, es el momento de decidir el formato que va a tener tu publicación. Puede ir plegado y grabado como una revista o por otro lado, puede ir solamente plegado ya que es un desplegable. Tienes muchas posibilidades.
A parte de esto, debes tomar la decisión de las medidas con las que vas a trabajar. Si por ejemplo utilizas medidas estándar a la hora de su impresión te resultará más económico que si lo haces con unas medidas fuera de la común.
Como te hemos comentado antes normalmente los fanzines están compuestos por 8 páginas, pero dependiendo de la cantidad de material con la que trabajes necesitarás más o menos.
Como en el caso del storyboard, necesitas hacerte un esquema del número de páginas con las que vas a trabajar y señalar en cada una de ellas que información o elementos van incluidos.
Cuando ya tengas todo organizado, el último paso que debes hacer antes de ponerte a diseñarlo es la elección de papel con la que vas a trabajar.
Ahora solo te queda la fase de diseño, es elección tuya si lo vas a realizar al estilo antiguo con recortes e ilustraciones a mano o por el contrario vas a diseñarlo de manera digital.
Hacer fanzines es un proceso de diseño excepcional con el que desarrollar tu creatividad.