La velocidad de carga de un sitio web está directamente relacionada con la experiencia de usuario: a mayor velocidad, los usuarios tienen una navegación más fluida y cómoda. A pesar de que pueda parecer una de tantas características de un sitio, lo cierto es que tiene un gran impacto para sus visitantes.
Aquí entran en juego factores como el hosting, el diseño de la página, e incluso el propio código.
La velocidad de carga: conversiones y posicionamiento SEO
Para los negocios, un sitio optimizado se traduce en que los visitantes de sus páginas tengan mayores probabilidades de convertirse en clientes, e incluso regresar en el futuro.
Mientras, un sitio web lento tiende a tener un impacto negativo en el usuario, lo que favorece a la tasa de abandono y disminuye las posibilidades de que los visitantes se conviertan en compradores. Por otro lado, el posicionamiento en Google se ve afectado por esta velocidad de carga. Desde hace algunos años, Google ha incorporado la velocidad a los numerosos factores incluidos algoritmo de posicionamiento.
Esto significa que una web que carga lentamente tendrá un factor negativo que va a empeorar su posicionamiento en los resultados de búsqueda. Así, disminuyen tanto su visibilidad como su tráfico. En términos de negocios en línea, lo podemos ver como una disminución radical de su alcance.
El hosting: uno de los pilares de una buena velocidad de carga
Los sitios web están compuestos por archivos que se guardan en un servidor. Esto es lo que se conoce como hosting: el servicio de almacenamiento para todos los archivos de tu web y desde donde se sirve el contenido de la web a los usuarios que lo visitan.
El hosting influye directamente en la velocidad de carga de una página porque es lo que determina la velocidad máxima de transferencia de los archivos desde el servidor al dispositivo de los usuarios.
Por tanto, lo principal es encontrar un buen hosting que cumpla con las siguientes características:
- Con discos NVMe SSD. Los discos NVMe SSD son hasta 10 veces más rápidos que los discos duros tradicionales y los SSD normales. Así, un servicio de hosting que los proporciona una velocidad de carga significativamente más rápida.
- Soporte técnico 24×7. Asegúrate de elegir un servicio que ofrezca soporte técnico a cualquier hora y en tu idioma para ayudarte lo más pronto posible a superar cualquier incidencia que se presente.
- Elige un panel de control fácil de gestionar. Los paneles de control como Plesk o cPanel son los más usados en el mercado por su facilidad y flexibilidad. Asegúrate de que tu hosting tenga alguno de ellos u otro similar.
- Servicios de Backups y otros extras. Siempre es bueno elegir un hosting que tenga servicios complementarios como backups automáticos, dominios, certificados SSL y cualquier otro que contribuya a tener un sitio web cómodo de usar.
Recomendaciones adicionales para mejorar la velocidad
También existen otras acciones que mejoran de manera significativa el rendimiento de una página. Son pequeñas, pero la suma de todas ellas generan un gran cambio.
- Optimiza las imágenes. Las imágenes son uno de los elementos más pesados de una página web, así que busca opciones como reducir su tamaño, cambiar el formato e incluso usar herramientas de compresión que mantienen la calidad.
- Usa una CDN. Una Content Delivery Network es una red de servidores que almacena copias de tus archivos y los entrega desde la ubicación más cercana al usuario, lo que disminuye el tiempo de transferencia.
- Reduce el número de solicitudes HTTP. Cada archivo en una página web, como imágenes, CSS y JavaScript, requiere una solicitud HTTP separada. Puede reducir las solicitudes al quedarte únicamente con los archivos necesarios.
- Minimiza el código. Elimina el código innecesario o redundante de tu página web. También considera reubicar ciertas partes del código para que cargue primero lo más importante, de manera que mejore aún más la experiencia del usuario.