Este dibujo a lápiz es simplemente asombroso el grado de realismo conseguido. El artista se denomina a si mismo como «Artmoron» y no hemos podido encontrar su web. Aunque si que compartimos algunas fotografías de su trabajo a lápiz para seguir asombrándonos por el uso de claroscuros.
Artmoron ha dibujado una de las puertas de la catedral de Milán. Veremos una fotografía real de esa puerta para que podáis comparar donde se encuentran las diferencias, ya que el grado de realismo conseguido es apabullante cuando buscamos las diferencias.
Y realmente podemos darnos cuenta de que es un dibujo cuando vemos parte del desarrollo, puesto que en la lámina final casi parece más bien una fotografía de esa puerta que un dibujo trabajo por un artista como Artmoron.
Es increíble el grado de trabajo en las sombras para encontrar valores cromáticos muy bien logrados y que resultan en un sinfín de grises y negros, lo que permite jugar con el volumen de los cuerpos y todas esas figuras que emergen de la puerta en bronce.
Un trabajo que prácticamente es un gran estudio sobre la iluminación y cómo se debería de trabajar. No llegaremos a tal grado de excelencia si nos ponemos manos a la obra, pero es un modelo para estudiar y fijarnos la gran diferencia que puede existir en buscar esos grises más claros y aquellos más oscuros.
Artmoron también sabe dar el tono de negro suficiente para precisar en la profundidad y resaltar esos espacios bien definidos. Una obra a resaltar y a colocar entre aquellas bien llamativas que pasan por estas líneas. Si supiéramos el nombre de su cuenta de Instagram o Facebook, lo compartiríamos, así que lo dejamos en el anonimato al artista detrás de esta obra.
No os perdáis estos trabajos hiperrealistas a lápiz o carboncillo que no se quedan muy lejos.