Los vídeos son uno de los formatos más populares y demandados en la web, ya que permiten transmitir información, entretenimiento y emociones de una forma muy atractiva y dinámica. Sin embargo, los vídeos también tienen un inconveniente: ocupan mucho espacio. Esto puede suponer un problema a la hora de almacenarlos, compartirlos o subirlos a plataformas como YouTube, Instagram o Facebook, ya que pueden tardar mucho en cargarse, consumir muchos datos o perder calidad.
Por eso, en este artículo te vamos a enseñar cómo comprimir vídeos sin perder calidad, es decir, cómo reducir el tamaño de tus vídeos sin que se vean peor o se escuchen mal. Aquí ya hemos comentado métodos parecidos. Para ello, te vamos a mostrar las mejores herramientas online y offline que puedes usar para comprimir tus vídeos de forma fácil, rápida y segura. Si quieres saber más sobre este tema, sigue leyendo y descubre cómo puedes comprimir vídeos sin perder calidad con tu ordenador o tu móvil.
¿Qué es comprimir un vídeo y por qué hacerlo?
Comprimir un vídeo significa reducir el tamaño del archivo que lo contiene, eliminando o modificando algunos de los datos que lo componen. Al comprimir un vídeo, se busca que ocupe menos espacio sin que se aprecie una diferencia notable en la calidad de la imagen y el sonido. Esto se consigue aplicando algoritmos de compresión, que pueden ser de dos tipos: con pérdida o sin pérdida.
La compresión con pérdida elimina algunos de los datos que se consideran menos importantes o perceptibles para el ojo humano, como los colores, los detalles o los sonidos de baja frecuencia. Esto hace que el tamaño del archivo se reduzca mucho, pero también que la calidad del vídeo se degrade. La compresión sin pérdida, en cambio, reorganiza los datos de forma más eficiente, sin eliminar ninguno. Esto hace que el tamaño del archivo se reduzca menos, pero que la calidad del vídeo se mantenga intacta.
Comprimir un vídeo puede tener varias ventajas, como:
- Ahorrar espacio de almacenamiento en tu ordenador, tu móvil o tu nube.
- Agilizar el envío y la recepción de vídeos por correo electrónico, WhatsApp o Telegram.
- Facilitar la subida y la reproducción de vídeos en redes sociales o plataformas de streaming.
- Evitar problemas de compatibilidad o de formatos con diferentes dispositivos o aplicaciones.
¿Qué herramientas usar para comprimir vídeos?
Existen muchas herramientas que puedes usar para comprimir vídeos sin perder calidad, tanto online como offline. Algunas de estas herramientas son:
- VLC: El mítico VLC es uno de los programas de reproducción de vídeos más conocidos del mundo, que destaca por su versatilidad y por poder reproducir casi cualquier formato. Pues bien, también tiene una función con la que puedes comprimir vídeos eligiendo tú la manera en la que lo vas a hacer o el formato de salida.
- HandBrake: Una herramienta de código abierto que puedes descargar en Windows, macOS y GNU/Linux, y sirve para cambiar el formato de un vídeo, pudiendo reducir su peso, añadir subtítulos, y varias opciones más. Es muy flexible a la hora de reducir el tamaño del vídeo.
- VideoSmaller: Además de programas instalables, también hay algunas páginas web que puedes utilizar con este mismo fin. Esta web te permite reducir los vídeos eligiendo el nivel de compresión o si quieres cambiar su resolución. Lo hace totalmente online, con soporte para formatos MP4, AVI, MPEG y MOV, y la promesa de que el vídeo que subas se borrará a las pocas horas. Al ser gratis tiene un límite importante: el vídeo que subas no puede ocupar más de 500 MB.
- Movavi Video Converter: Se trata de una herramienta de referencia para la conversión de vídeos, cambiándoles el formato o comprimiéndolos sin pérdida de calidad para que ocupen menos. Entre otros, funciona con formatos MP4, 3GP, AVI, MPEG, DivX, FLV, SWF, VOB, MKV, MOV, WebM o WMV, y es uno de los pocos compresores que permiten trabajar con 4K. Está disponible para Windows y macOS, y su versión gratiuta está un poco limitada por tener otras versiones de pago.
Recomendaciones para comprimir vídeos sin perder calidad
Hay algunos consejos que te pueden ayudar a comprimir tus vídeos sin perder calidad de forma más eficaz. Estos son:
- Elige el formato adecuado. No todos los formatos de vídeo tienen la misma calidad ni el mismo tamaño. Algunos formatos son más comprimidos que otros, lo que significa que ocupan menos espacio pero también que pierden más calidad. Por eso, es importante que elijas el formato que mejor se adapte a tu propósito y a tu dispositivo. Por ejemplo, si quieres subir un vídeo a YouTube, lo mejor es que uses el formato MP4, que es el más compatible y el que mejor conserva la calidad. Si quieres enviar un vídeo por WhatsApp, puedes usar el formato 3GP, que es el más ligero y el que menos consume datos. Si quieres guardar un vídeo en tu ordenador, puedes usar el formato MKV, que es el que más opciones de personalización te ofrece.
- Elige la resolución óptima. La resolución es el número de píxeles que tiene un vídeo, y determina la nitidez y el detalle de la imagen. Cuanto mayor sea la resolución, mayor será la calidad, pero también mayor será el tamaño. Por eso, es importante que elijas la resolución óptima para tu vídeo, es decir, la que mejor se vea en tu pantalla y la que menos espacio ocupe. Por ejemplo, si tu pantalla tiene una resolución de 1080p, no tiene sentido que uses una resolución de 4K, ya que no notarás la diferencia y estarás ocupando mucho más espacio. Lo mismo ocurre si tu pantalla tiene una resolución de 720p, no te conviene usar una resolución de 1080p, ya que estarás perdiendo calidad y ocupando más espacio. Lo ideal es que uses la misma resolución que tu pantalla, o una ligeramente inferior si quieres ahorrar espacio.
Ten los videos que quieras con la mejor calidad
Comprimir vídeos sin perder calidad es una tarea que puedes realizar con facilidad y rapidez, gracias a las herramientas online y offline que te hemos mostrado. Estas herramientas te permiten cambiar el formato, la resolución, el bitrate y otros parámetros de tus vídeos, para que puedas adaptarlos a tus necesidades y preferencias. Así podrás ahorrar espacio, agilizar el envío y la subida, evitar problemas de compatibilidad y disfrutar de la mejor calidad de imagen y sonido.
Te animamos a que pruebes estas herramientas y que compruebes por ti mismo cómo puedes comprimir tus vídeos sin perder calidad. Recuerda que puedes elegir entre diferentes opciones y funciones, dependiendo de lo que quieras hacer. También recuerda que debes seguir unos consejos básicos para elegir el formato, la resolución y el bitrate adecuados, y para encontrar el equilibrio entre el tamaño y la calidad que buscas. Esperamos que este artículo te haya sido útil y que hayas aprendido cómo comprimir vídeos sin perder calidad con tu ordenador o tu móvil.