El briefing es puro arte medular en el diseño y renovación de la identidad corporativa de una empresa, de allí la importancia de aplicarlo, así que si estás pensando en diseñar tú logo o en mejorar el que tienes no deje de lado esta herramienta.
¿Qué es el Briefing?
Se trata de una especie de cuestionario donde interactúan el diseñador y la empresa que requiere del desarrollo del logo, respondiendo a las interrogantes contenidas en él y su finalidad es definir de la forma más clara posible los conceptos para poder llevar a buen término el trabajo de diseño solicitado.
¿Cómo ayuda el Briefing en la relación con el diseñador?
Es posible que se incurran en algunos malos entendidos por una parte y otra parte, bien porque se contrate a un diseñador que no se comprometa lo suficiente con el proyecto o porque se sub valore el trabajo de este, en todo caso, el Briefing puede ser de mucho apoyo a la hora de transmitir las ideas y conceptos que desea reflejar en su identidad corporativa.
¿Qué debe hacer como cliente?
Lo primero es saber que tu empresa debe tener una identidad original y propia, que te funcione para transmitir el concepto mensaje con la que la identifiquen, partiendo de esto procura transmitir ideas claras al diseñador y da respuestas precisas a sus interrogantes en cuanto al mensaje que pretendes llevar a tu público objetivo, infórmale cual es la percepción que tienen los clientes de tu empresa y cuál es la tuya; si no manejas claramente el tipo de público al que deseas dirigirse, utiliza el Briefing para orientarte y determinar no solo eso, sino a definir mejor la imagen del negocio y de ampliar el concepto que tiene de su empresa.
Al final, esto será de mucho provecho para ambas partes y permitirá que el trabajo sea más fluido.
Evita recurrir a ciertas soluciones que pueden ser fáciles en principio pero que a la larga no te van a funcionar, por ejemplo emular logotipos o imágenes ya existentes, lo ideal es que la imagen a diseñar identifique tu empresa, tu filosofía.
En cuanto al diseñador
Debes tener muy claro la responsabilidad que tienes en el proyecto y estar preparado a realizar las preguntas correctas y a responder las interrogantes del cliente oportunamente.
Parte importante de tu labor creativa es ir aclarando cada duda que se presente en el proceso previo al boceto ya que después debes elegir la tipografía, colores, estilos, compartir ideas y opiniones etc., siempre apoyándote en el briefing.
Trabajo en equipo
La comunicación constante entre ambas partes es básica, el diseñador debe ser capaz de explicarle el diseño al cliente, ya que es producto de todo lo que se le ha pedido, análisis y trabajo previo.
Cada quien tiene sus responsabilidades en el proceso, así que el cliente debe delegar en el profesional del diseño y confiar en su experiencia y creatividad, nadie mejor que este para seleccionar los elementos de tu logotipo, a la par que tendrás la responsabilidad de proveerle de la información necesaria y propuestas para que sean consideradas en la imagen corporativa.
Finalmente y si todo te ha resultado bien, habrá sido en parte a una buena comunicación, feedback, trabajo en equipo y el Briefing, que también habrá hecho su parte.
En esta etapa, al mirar el trabajo de diseño preliminar, tendrás una idea de cómo lucirá tu imagen y si transmite o no el mensaje deseado, se evitará entonces sorpresas cuando estén listas las propuestas definitivas.
El cliente habrá desarrollado una buena comunicación con el diseñador y su equipo de trabajo si lo tuvo, este se sentirá satisfecho ya que no solo está más cerca de su objetivo sino que se le ha hecho más sencillo gracias a la fluidez y calidad de la información, lo que le proporciona otras herramientas avanzadas para llevar adelante la identidad de la empresa en todos los formatos que se te han solicitado, para aportarle la asesoría adecuada.