Como diseñadores gráficos, para que un proyecto tenga un resultado correcto, hay que tener en cuenta los principios universales de diseño. Es por esto mismo, por lo que hoy vamos a hablar de los usos de los espacios en blanco en diseño.
Es primordial, que vosotros los diseñador, tengáis extremo cuidado y gusto en realizar diseños que sean sencillos y claros. Estos trabajos, deben atraer la atención de públicos diferentes, ya sea leyendo un blog, caminando por la calle o haciendo la compra.
Un buen diseño, debe reunir equilibrio visual y legibilidad, dos aspectos muy importantes y que pueden lograrse con un correcto uso de los espacios en blanco.
¿Qué son los espacios en blanco en diseño gráfico?
Los espacios en blanco, son uno de los principios más importantes en el mundo del diseño. Se trata, de las zonas en blanco que nos encontramos entre los diferentes elementos de un diseño.
Que se llamen espacios en blanco, no significa que deban ir a ese color, sino que se refiere a un espacio libre, un espacio vacío de texto o imágenes. Con estos espacios, se consigue tener tanto el texto como otros elementos del diseño organizados, además de que con ellos guiamos la vista de los espectadores.
Realizar un diseño sencillo en ved de uno recargado, puede llevarnos a que los espectadores focalicen más la atención sobre ellos. Utilizar espacios en blanco, es fundamental sobre todo en diseño web, ya que se puede mejorar la legibilidad, facilitar la lectura y además el rendimiento de dicho sitio.
Haciendo uso de elementos de diseño con un peso visual diferente, lograrás un equilibrio jugando con los espacios en blanco, alrededor de dichos elementos. Asimismo, estos espacios, consiguen crear una jerarquía visual en tu diseño, gracias a la combinación diversos espacios.
En conclusión, el uso de los espacios en blanco en diseño, son clave para que un trabajo funcione de la manera correcta. Es una herramienta fundamental con la que los diseñadores, conseguirán encontrar un equilibrio y una jerarquía en sus diseños.
Tipos de espacios en blanco
Existen cuatro tipos diferentes de espacios en blanco, con los que podrás trabajar y conseguir todo lo que hablábamos anteriormente.
Espacios en blanco activos
Este tipo de espacios en blanco, son los que se dan entre diferentes elementos del diseño. Su principal función es la de aportar énfasis y dinamismo a un elemento del diseño en concreto o por otro lado, para tener una lectura organizada.
Espacios en blanco pasivos
Por otro lado, este espacio es el que se da cuando escribimos palabras o líneas de texto. En este caso, se utiliza con el objetivo de organizar los diferentes elementos textuales y aportar la mayor legibilidad posible.
Micro espacios en blanco
En este caso, estos espacios en blanco, son espacios en negativo. Los podemos encontrar entre diferentes letras, palabras u otros elementos gráficos de nuestro diseño. Tienen como finalidad, que la composición donde van a ser utilizados esté organizada y estructurada.
Macro espacios en blanco
Por último, estos tipos de espacios en blanco son los que se aplican entre las diferentes columnas que se han creado o bloques de texto. Con este tipo de espacio, lo que se busca es dar una ligereza a la lectura, es decir más ritmo y fluidez.
Como podéis ver, son varios los espacios en blanco que se pueden usar a la hora de realizar un diseño. Son un elemento esencial, que si se usa de la manera correcta pueden ser de gran ayuda en cuanto a legibilidad y estructura en dicho diseño.
Cómo trabajar con los espacios en blanco
Estos elementos, también llamados espacios negativos, se pueden introducir teniendo en cuenta cuatro aspectos fundamentales como son el contenido, el diseño, el espectador y la marca con la que vamos o estamos trabajando.
Se deben utilizar los espacios en blanco con el objetivo de conseguir una estructura organizada de toda la información con la que trabajamos. Es decir, debemos saber organizar los diferentes elementos de diseño y como guiar la vista de nuestros espectadores hasta puntos importantes.
Esto que acabamos de mencionar, es primordial para que un buen diseño utilizando espacios en blanco funcione, facilitar la experiencia a nuestro público y saber guiarles para captar su atención.
Existen tres aspectos que hay que tener presentes a la hora de usar espacios en blanco en tus diseños, la legibilidad, el diseño de tono y el enfoque.
Como hemos comentado, el uso de los espacios en blanco es importante cuando queremos diseñar un contenido legible. A parte, de elegir todo lo que tiene que ver con la tipografía, tenemos que ver como los espacios en blanco funcionan con ella. Hay que conseguir que la combinación de ambos elementos, facilite la lectura y la experiencia de nuestro público.
Según como el diseñador utilice estos espacios en blanco, jugará con un tono u otro en toda su composición. Estos espacios en blanco, deben complementar al tono de marca con el que estamos trabajando. Si se trata de una marca minimalista, dejaremos muchos espacios en blanco.
Y por último, como hemos comentado son los espacios en blanco, quienes guían la mirada del espectador por todo el contenido de la composición. Si eres diseñador, ten en cuenta que con los espacios en blanco, puedes crear puntos focales en partes importantes de tu diseño.
Ejemplos de usos de los espacios en blanco en diseño
A continuación, os dejamos una serie de ejemplos donde poder observar cómo se hace uso de estos espacios en blanco en diferentes soportes de diseño.
Pantalla inicio Google
Revista Cereal
Pantalla venta online
Revista diseño
Página Apple
Debemos insistir en que un uso adecuado de los espacios en blanco en un diseño, ya sea editorial, web o diseño de marca son fundamentales para crear una buena experiencia a nuestros usuarios. Hay que ponerse en su situación e intentar descubrir lo que les gustaría ver a ellos y les facilitaría la lectura.
Pensar en mejorar su experiencia cuando ven un diseño, es un síntoma de que debemos centrarnos en diseñar un buen contenido, de la mejor manera posible, y por medio, de los espacios en blanco podemos conseguirlo.