Ortotipográfico: qué es, para qué sirve y cómo se usa

Ortotipográfico

¿De verdad pensabas que, por dedicarte al diseño gráfico, no ibas a tener que estudiar lengua, ortografía y aplicar todo lo ortotipográfico a tus diseños? Pues lo cierto es que no es así. La ortotipografía es una parte importantísima de los caracteres con los que diseñas, al punto de que podrías arruinar todo el resultado si fallas en ello.

Pero, ¿qué es la ortotipografía? ¿Por qué un diseñador tendría que mirar aspectos ortotipográficos? Te lo contamos a continuación.

Qué es la ortotipografía

qué es ortotipografía

Lo primero que necesitas entender perfectamente a qué nos estamos refiriendo con la ortotipografía. Una definición rápida, clara y directa sería la siguiente:

Conjunto de normas que permiten utilizar correctamente la tipografía.

¿Qué quiere decir? Pues todas esas normas que te permiten usar las comillas, los guiones, las itálicas, las comillas latinas, los corchetes y otros elementos tipográficos de manera correcta (y no al revés).

Y, antes de que lo preguntes, no, muchos diseñadores, o profesionales en general de la comunicación, fallan. Dicho de otro modo, no aplican bien las normas ortotipográficas. Y eso puede arruinar tus posibilidades de alcanzar clientes más pudientes o incluso tener más éxito.

Para qué sirve la ortotipografía

Ahora que tienes una mejor idea de qué son las normas ortotipográficas, debes saber el motivo por el cual hay que tener un buen conocimiento ortotipográfico aun seas diseñador gráfico, creativo, o incluso profesional de la comunicación.

El motivo es simple: tener una buena comunicación y hacer agradable la lectura de lo que hagas.

Por ejemplo, los espacios entre las letras, las inclinaciones, la tipografía de las palabras.. Todo esto es parte de la ortotipografía y saber cómo debes trabajar con ella ayudará a que los diseños que hagas sean mucho mejores.

Cómo se usa la ortotipografía

Ya tienes el qué es y también el para qué sirve. Pero, ¿sabrías utilizarla? Seguramente, si eres escritor, periodista, redactor… sí que tengas una ligera idea de los pasos que se da en los textos. Pero como diseñador gráfico, es posible que no.

Verás, lo primero que se hace es escribir el texto. Puede ser largo o corto. Pero es un texto, ya sea para una imagen, una campaña, un cartel… Una vez se tiene escrito, es cuando se pasa a una segunda fase ortotipográfico, es decir, en ella hay que ir revisando palabra por palabra, incluso letra a letra, si se quiere que aparezcan en cursiva, negrita, si hay incisos, si se necesitan guiones, el tamaño de la letra, interlineado, tipografía…

Todo esto va a depender de varios factores como pueden ser:

  • Contexto. Porque dependerá de cuál sea el ambienten en el que esté escrito (o el que quiera reflejarse), para utilizar unos elementos u otros, así como un texto u otro.
  • El contenido. Porque puede ser más corto (y por tanto con menos elementos ortotipográficos) o más largo.
  • Dónde se publica. No es lo mismo que se publique en un periódico que se ponga una valla publicitaria con ello.

Ámbitos a nivel ortotipográfico

ortotipografía

Los ámbitos se refiere a todo lo que se tiene en cuenta en la ortotipografía. A grandes rasgos, lo más importante sería lo siguiente:

Variantes de la letra

Por variantes de la letra debes entender que hay tres formas de escribir una letra:

  • Con letra redonda. Es la letra común que utilizamos para escribir.
  • Con cursiva. Esta solo se debe utilizar al citar nombres de películas, libros, cuadros, programas de televisión, palabras extranjeras, seudónimos si están acompañados del nombre real, palabras a enfatizar, nombres científicos…
  • En negrita. Las negritas sirven para destacar lo más importante. Eso sí, hay que ser selectivo porque no se puede poner en negritas todo el texto.

Citas (el uso de las comillas)

Las citas se suelen enmarcar con las comillas. Es una forma de encerrar una parte del texto indicando que eso que se ha escrito no lo dice la persona que ha escrito, sino otra persona. Ahora bien, debes saber que no existe solo un tipo de comillas, sino muchos.

Las más utilizadas son las bajas o latinas, pero también tienes las bajas angulares, voladas simples o altas, mecanográficas o las llamadas antilambda (estas se usan sobre todo en matemáticas).

Hay dos tipos de comillas simples, las apóstrofas (‘) y las primas (´) que en realidad no son comillas, sino que son las que se utilizan para señalas los minutos y los segundos. Pero no se deberían utilizar como comillas).

Signos de puntuación

El punto, la coma, el punto y coma, los dos puntos, los puntos suspensivos… Habitualmente aprendemos a utilizar tanto el punto como la coma, aunque muchas veces, esta última, se utiliza de manera errónea.

Por ejemplo, un error habitual con la coma es la de ponerla separando el sujeto con el predicado. Te ponemos un ejemplo:

El perro, es el mejor amigo del hombre.

Muchos piensan hay una parada entre perro y es, de tal manera que colocan la coma sin darse cuenta de que en esa frase el sujeto es “El perro”, mientras que el predicado es “es el mejor amigo del hombre”. Y no se debe separar.

Con respecto al punto y coma o a los dos puntos, son pocas las personas que recuerdan lo que estudiaron en el colegio y en el instituto acerca de su uso, por lo que muchos procuran no utilizarlos. Y, aun así, son muy importantes para una buena comunicación.

Uso del guión

La función del guión no es otra que la de unir dos palabras, o para separar una palabra de tal manera que se entienda que esta va junto. Ahora no todos los idiomas permiten separar las palabras.

Otro de los usos que se le da al guión es el de crear los diálogos en los textos. Si bien no se utiliza el mismo de antes, sino uno diferente (más ancho).

Otros ámbitos que también se tienen que tener muy en cuenta hacen referencia a los paréntesis, los corchetes, la raya o incluso las tildes.

Las reglas ortotipográficas para un diseñador

ejemplos Fuente_YouTube

Si en tu formación como diseñador o creativo dedicas tiempo a mejorar tu ortotipografía, además de la ortografía, estarás ofreciendo un mejor servicio a tus clientes. Y es que podrás comunicarte mucho mejor y, sea el mensaje que tengas que poner, este se entenderá y llegará correctamente a la persona.

Un ejemplo claro sería este:

Tomo una cerveza. Solo.

Tomo una cerveza solo.

En el primer caso puede que indique que se tomará una cerveza y ya está. Pero si se escribe de la segunda manera podría indicar que no hay nadie con esa persona y que está bebiendo él sin ninguna otra compañía.

Sin los conocimientos ortotipográficos esa anterior frase seguramente solo se pondría de la segunda forma, y el mensaje sería ambiguo. ¿Entiendes ahora cómo lo ortotipográfico puede ayudar a tus proyectos de diseño?


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